Después siete años de silencio y viviendo en Australia, Knapp presentará un nuevo disco que le muestra renovada, pero con el mismo estilo y personalidad musical que le popularizó. by Marco Antonio Mena
Jennifer Knapp, nominada a un GRAMMY y ganadora de un Dove Award, regresa de un hiato de siete años con un nuevo álbum titulado Letting Go (Graylin/RED/Thirty Tigers), el cual saldrá al mercado el 11 de mayo de 2010. Antes de la presentación oficial del nuevo disco, Jennifer dará a conocer parte de sus nuevas canciones en una gira que la llevará a recorrer varias ciudades en los Estados Unidos junto a Derek Webb, la cual se iniciará este 5 de marzo en la ciudad de Nueva York. Posteriormente, Knapp se unirá a gira Lilith Fair. Los fans pueden reservar el álbum durante ambas giras, quienes recibirán un CD de edición limitada exclusiva con demos acústicos del disco. Grabado en Nashville, Letting Go es producido por Paul Moak (Mat Kearney, Martha Wainwright, Amy Grant) y destaca diez canciones íntimas matizadas por folk, country y rock, cada una de ellas mostrando su espiritualidad y asombrosa sinceridad. “Es un humilde honor el poder tener a tales devotos admiradores que han esperado por mi regreso para escribir y cantar en vivo”, explica Jennifer Knapp. “Para mí, es el refugio de lugares tranquilos que siempre han dado nacimiento a las profundidades de sinceridad que la música descubre. Al final, ninguna canción esta completa hasta que esta haya sido compartida y cantada. Es verdaderamente sobrecogedor el tener la oportunidad de resurgir con una pasión y visión fresca, conociendo que los amantes de mi música están allí para ser parte de la alegría”. Aunque para la actual generación el nombre de Jennifer Knapp pueda ser desconocido, ella vendió por sobre el millón de álbumes con sus discos Kansas (1998), Lay It Down (2000) y The Way I Am (2001). Su trabajo debut le permitió recorrer gran parte del mundo, incluso compartiendo tarima con Jars of Clay en 1999 en la gira Lilith Fair. Con un matiz musical que le identificaba con el folk y el country matizado con rock, sus canciones mostraban siempre su asombrosa sinceridad y espiritualidad. Su nombre fue parte de positivas críticas de parte de prestigiosas publicaciones, como Los Angeles Times y People Magazine. Jenniffer ganó su primer Dove Award en 1999 en la categoría Mejor Nuevo Artista, y también logro una nominación en los GRAMMY en 2002 más otra nominación a los Dove en 2003.
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