Buena Tierra
El último grupo mencionado en la Parábola del Sembrador es representado por la semilla que cayó en buena tierra:
Tiene un corazón dócil. No como el primero que tiene endurecido el corazón
Tiene una convicción no emocional. No tiene que ver para creer.
No ama al mundo. Como Moisés, quien consideró como mayor riqueza el oprobio de Cristo que los tesoros de Egipto. (Heb 11:26)
“Y otros son aquéllos en que se sembró la semilla en tierra buena; los cuales oyen la palabra, la aceptan y dan fruto, unos a treinta, otros a sesenta y otros a ciento por uno.” (Mar 4:20)
La palabra “aceptan” nos habla de una raíz que abraza la buena tierra y que penetra en ella. Jesús habla en Juan sobre dar fruto:
“Yo soy la vid verdadera, y Mi Padre es el viñador. “Todo sarmiento que en Mí no da fruto, lo quita; y todo el que da fruto, lo poda para que dé más fruto. “Ustedes ya están limpios por la palabra que les he hablado. “Permanezcan en Mí, y Yo en ustedes. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo si no permanece en la vid, así tampoco ustedes si no permanecen en Mí. “Yo soy la vid, ustedes los sarmientos; el que permanece en Mí y Yo en él, ése da mucho fruto, porque separados de Mí nada pueden hacer. “Si alguien no permanece en Mí, es echado fuera como un sarmiento y se seca; y los recogen, los echan al fuego y se queman. “Si permanecen en Mí, y Mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran y les será hecho. “En esto es glorificado Mi Padre, en que den mucho fruto, y así prueben que son Mis discípulos. (Jua 15:1-8)
Aquí Jesús menciona tres niveles de fruto los cuales corresponden al 30%, 60% y 100% en Marcos 4:20:
30% - Fruto
60% - Más fruto
100% - Mucho fruto
Frutos que Dios Espera
Leamos varios pasajes que hablan de los frutos que Dios espera en nosotros:
Pero ahora, habiendo sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tienen por su fruto la santificación, y como resultado la vida eterna. (Rom 6:22)
Pero el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, dominio propio; contra tales cosas no hay ley. (Gal 5:22-23)
Porque el fruto de la luz consiste en toda bondad, justicia y verdad. (Efe 5:9)Llenos del fruto de justicia que es por medio de Jesucristo, para la gloria y alabanza de Dios. (Fil 1:11)
Porque aun a Tesalónica enviaron dádivas más de una vez para mis necesidades. No es que busque la dádiva en sí, sino que busco fruto que aumente en su cuenta. (Fil 4:16-17)
Para que anden como es digno del Señor, haciendo en todo, lo que Le agrada, dando fruto en toda buena obra y creciendo en el conocimiento de Dios. (Col 1:10)
Al presente ninguna disciplina parece ser causa de gozo, sino de tristeza. Sin embargo, a los que han sido ejercitados (adiestrados) por medio de ella, después les da fruto apacible de justicia. (Heb 12:11)
Hermanos: que cada uno pueda ubicarse y tomar las decisiones correctas y que la Palabra se arraigue y de su fruto. ¡Amén!
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